RIO RAICES

UN DIA CALUROSO, BUENA WEED Y UNA TARDE
CALUROSA ES TODO LO QUE SE NECESITA PARA
PASAR UNA TARDE CHILLI

Enero 2021
POR HIGHLIGHTS MAGAZINE

Si uno se sitúa entre las calles asfaltadas de Monterrey, donde la tarde transcurre lenta y calurosamente, el día puede parecer interminable con un sol ocultándose casi a las 9 pm. Pero si buscamos escaparnos por un momento de la cotidianeidad de los días y estamos dispuestos a salir un poco del área metropolitana de Monterrey, unos 60 km hacia el sur, en el municipio de Allende, nos encontraremos con uno de esos oasis que hacen más llevadero el verano en esta región semidesértica, que con sus paisajes sepias de matorrales y pastizales nos recuerdan al México antiguo y a la vez hace que olvidemos que en la región también existen estas burbujas tropicales, o por lo menos, frescas y agradables para tomar una cerveza a media tarde, y ¿por qué no?… especial para aventar buenos humos.

La intensidad del sol de mediodía resalta los verdes paisajes de la carretera. Quintas campestres, campos abiertos y uno que otro ganado hacen que el ambiente inmediatamente se torne relajado, como si el mundo no llevara prisa. Nos dirigimos al río raíces, a la zona de la entrada que lleva al sitio conocido como ‘El charco de las víboras’, el cual ya hemos tenido la oportunidad de visitar anteriormente y es incluso un poco más impresionante. Una vez aquí, buscamos un lugar a la orilla del río para ubicarnos. Como nosotros, muchas personas (en su mayoría familias), hacen de la orilla del río su sitio ideal para resguardarse por un día del ardiente sol, pero nada los resguarda del ardiente carbón de la carne asada, la cual no podía faltar. Las personas hacen de pequeños rincones del río su piscina personal.

Nosotros no fuimos la excepción en esto. Para ser inicios de verano considero que el agua no debería estar tan fría, pero con la elevada temperatura del ambiente la situación se equilibra un poco. El río varía en sus dimensiones, existen puntos donde su ancho es de cuatro a cinco metros y otros donde pareciera alcanzar una amplitud entre 20 y 30 metros, por ende, su profundidad puede variar desde unos cuantos centímetros hasta tres o cuatro metros, por lo que las precauciones para ingresar en un área natural así son las mismas que para cualquier otra área de este tipo como ríos, arroyos, lagos, etcétera. Seguridad ante todo.

Al ser parte de la Sierra Madre Oriental, la vegetación abunda en esta zona al sur de Monterrey.

La banda, como siempre, venía preparada con algo para fumar. Prendemos fuego y las cervezas y música completan la terna para una tarde de relax. Tranquilidad total, solo pájaros cantando en las copas de los árboles. La cristalina calma del lugar es quebrada en ocasiones por los razer que pasan cortando el río, que no deja de ser un espectáculo más que se suma al cuadro que da el paisaje. Este lugar es un sitio muy frecuentado para practicar esta actividad. Al ser hoy un día entre semana, solo pudimos ver un par de razer explorando el lugar. En tiempos sin pandemia, la cantidad de estos vehículos que recorren el lugar en fin de semana es mucho mayor. Una patrulla de la policía municipal se adentra en la zona por toda la orilla del río, vigilando que nadie esté alterando el orden, lo cual es positivo para asegurar la tranquilidad de las familias que conviven en el lugar. Nuestro grupo, al ser varios amigos, fue observado detenidamente por los elementos policiacos, pero al ver que tomábamos fotos y convivíamos de forma tranquila como el resto de las personas, siguieron su camino. 

Seguimos caminando por la ribera mientras tomamos las cervezas. Algunas zonas del río están más solas que otras, incluso por momentos no se ve a nadie más en ninguna dirección. La tarde avanza y los rayos de sol comienzan a desaparecer entre el follaje de los árboles. Sin duda alguna, este ha sido un buen sitio para ocultarse por un momento del calor mientras buenos humos se elevan por el aire.