Enero 2022
POR HIGHLIGHTS MAGAZINE
En una olvidada casa de una complicada ciudad, personas con chalecos de piel beben cerveza mientras sus risas quiebran la tranquilidad de la noche. Las motocicletas afuera nos dicen que hemos llegado al lugar indicado. Nos encontramos en la inauguración de la Casa Club de Serpiente MC, un Moto Club de la ciudad de Guadalupe (NL), México.
Los tres o cuatro riders que nos reciben ya traen la fiesta encima y circulan cerveza y un poco más; el rugido de motocicletas llegando poco a poco llena de vida una casa que de momento se encuentra sin nada en su interior, pero que es perfecta para que un grupo de personas exploten sus emociones. De entre todas las motos que llegan, un miembro del club hace su aparición acompañado de una dama: el vato que desciende de la moto comienza a saludar a todos en la Casa Club de manera amable, respetuosa y con cierto toque de carisma, pronto se entiende que es el Presidente del club. Una anarquía organizada comienza a orquestarse como una obra en el lugar: hombres y mujeres van y vienen hacia todos los lados, entre saludos y abrazos, explorando el lugar, mientras que botellas chocando y latas abriéndose son la melodía en esta pintura. Después de un rato de ambientación, el Presidente convoca a una reunión para dar inicio a la charla. En uno de los cuartos se reúnen cinco miembros del Moto Club: (J) Jimmy, el Presidente, ya mencionado; (Z) Zapata, Vicepresidente; (CH) Chevorracho, Tesorero; (MC) Marcus, Sargento de Armas; (MA) Mario, Capitán de Ruta; solo el Secretario no se encuentra en el sitio.
Para conocer algo, un buen inicio siempre es su definición, y en el caso de un Moto Club Jimmy lo aclara, a la vez que nos presenta al que pertenece. <<(J) Se podría definir como un grupo de personas con gusto por las motocicletas; que salen a acampar, a eventos, a fiestas, reuniones en el Moto Club. Serpiente Moto Club tiene cuatro años y algunos dos/tres meses más, se fundó en 2017. Éramos tres personas al principio, realmente se necesitan como mínimo seis miembros, pero era lo que había; la idea, las ganas y de ahí empezaron a entrar amigos, amigos de amigos. Es una de las cosas que nos caracteriza como Moto Club, que la mayoría o si no es que todos los miembros han sido amigos o conocidos de las mismas personas que ya estamos en el Club>>. Serpiente MC es una organización, aunque no exista internamente un reglamento a seguir. Sin embargo, en toda hermandad la confianza siempre será un pilar fundamental, y palabras de ellos mismo, algo que caracteriza a Serpiente MC es el respeto y la confianza. <<(CH) No existe una regla como tal, es que exista la confianza entre nosotros. No nos manejamos por reglas, porque hay Moto Clubs donde no se puede cargar una navaja, un gramo de marihuana, no se puede hacer ese tipo de cosas por cuestiones de reglas internas. Cada quien es responsable de sí mismo, al final del día somos adultos, somos mayores de edad y nos responsabilizamos cada quien de lo suyo; la única regla es que exista confianza de poder entrar a una casa de nosotros a ir a comer, a cenar, ir a bañarte y es algo que existe, es algo latente en lo que todos estamos involucrados en la misma sintonía>>.
Unos con todos los parches y otros con algunos cuantos, pero todos portan con orgullo su chaleco. Desde un inicio el Moto Club deja claro que más allá del título en el organigrama del club, no hay distinciones entre sus miembros, todos son iguales. <<(J) En general el Moto Club se rige por todos, por toda la mesa directiva: para las decisiones del Club, para los demás miembros, fuera de la mesa, se rigen completamente por la mesa. No solamente porque yo sea el Presidente voy a decir que se hace y que no se hace, aquí la voz completa es la mesa completa en mayoría de votos, cuando se requiere. (CH) Todos tenemos una diferente perspectiva y cada quien va a dar su punto de vista y en conjunto vamos a llegar a un acuerdo. La mayoría estamos en la misma sintonía>>.
La noche avanza y personas siguen entrando y saliendo por el lugar, varias de ellas se quedan en las puertas y ventanas de la habitación escuchando lo que la mesa del Club tiene para decir. Algunos son miembros y otros solo amigos del Moto Club. Queda claro que aunque sean buena onda y te integren en su círculo, no se puede llegar de buenas a primeras solicitando una membresía. <<(J) Primeramente alguien te invita, te presenta, te invitamos varias veces a que vengas; a veces te ponemos pedo para ver cómo es realmente tu carácter, tu manera de comportarte. De repente también alguna que otra provocación para ver tu manera de responder, para ir calando a la persona para ver como es. En otros lugares se utiliza mucho que al aspirante o prospecto lo traen de gato, por los mandados, de que: “Eres el nuevo, trae esto”, novatada aquí no, por lo mismo que queremos que respete se le trata con respeto desde que llega. (CH) Existe la regla del más morro, pero esa es universal (risas). El que llegue al último, el más morro o el que no traiga feria y esa es toda la vida, con quien te juntes, pero de ahí en fuera no hay pasades de verga, como de que: “Muévete a la verga”, no hay manera, también tiran vergazos, todos se defienden. No hay manera de tratarlos mal cuando puede haber una confianza que se trate chido. Es diferente decirle: “Tírame un paro y hazlo para tirarle un paro a todos”, ya ahí cambia la perspectiva a la indicación>>.
La verdad dicha por Chevorracho recuerda que todo se gana con esfuerzo, poco o mucho, pero algo de eso se requiere. Como en un viaje largo por carretera, la constancia es la clave para llegar al destino, no la velocidad. Los parches en Serpiente MC no se regalan. (J) Se van entregando poco a poco. Primero les damos los frontales que vienen siendo su nombre y la insignia y luego ya posteriormente los de la espalda por tiempo, por rodada. Todas las semanas nos juntamos los viernes, esas juntas se puede decir que son cotidianas, cada quien sabe que el viernes nos juntamos y viene el que quiera venir. Eso también lo vamos viendo, vamos evaluando la presencia, la asistencia, el interés que tengan… (CH) Y no necesariamente siempre son salidas oficiales entre el Club, hay veces que entre Marcus y yo nos juntamos, entre Zapata y Adán se juntan, Pepe se junta con alguien más. Somos prácticamente un grupo muy cerrado porque al final no tenemos como que muchas amistades fuera del grupo del Moto Club. Entonces el cotidiano, el día a día, el invitarse a comer, el invitarse a cenar viene siendo también entre los mismos miembros, no sale de ese círculo. (J) No solamente es nuestra amistad los viernes. Entre semana pueden caer a mi casa a comer, a arreglar su moto, a un paseo al río, una salida simplemente random>>.
Si bien portar el chaleco no obliga a sus miembros a regirse bajo ciertas normas o códigos de conducta, si trae consigo algo más que solo portarlo; se vuelve parte de la identidad de los individuos, y estos, a su vez, le rinden tributo bajo su forma de llevar la vida dentro de este mundo. Cada uno a su manera. (J) No es como que digas: “Traes chaleco, no hagas esto o lo otro”, se vale todo. Muchos clubes cuidan su imagen y el qué dirán, nosotros realmente no; ha tocado que nos lleva la antialcohólica, accidentes, nos han arrestado. A mí me ha llevado varias veces la chota con el chaleco puesto (risas). (Z) Día con día te levantas, te pones tu chaleco, vas pal jale. El chiste es siempre andar presentable, de mi parte, todos los días voy al trabajo, en el tramo al trabajo agarro mi moto y voy pal’ trabajo con mi chaleco puesto, todos los días. (CH) Parece que no, pero ya traes un chaleco, un nombre, lo que portas y si el día de mañana te quedas tirado por gasolina, ponchadura, muchas veces te ayudan mas por traer un chaleco. No eres una persona que no sepa del desmadre, sino que ya estás en una organización controlada en la que estás a gusto, en la que representas algo y muchas veces por traer el chaleco te pueden ayudar un chingo de gente, nada más por estar en un Moto Club. (MA) Cuando te accidentas, traes el chaleco y alguien pasa, no te conoce, pero ya en los grupos de que: “Se accidentó, un tirado y es del Moto Club tal” y de volada llegan>>.
Si bien el ambiente de camaradería en la Serpiente MC está más que presente, puede que no siempre se pueda mantener así, hablando específicamente de la Casa Club hacia afuera. Existen los roces entre grupos, como en toda comunidad, aunque siempre se busca que las cosas se solucionen mediante la vía más pacífica. La dinámica sobre cómo funciona esto queda claramente explicado por Jimmy y Chevorracho. (J) Si hay, por lo general más en el norte del país, más en la frontera (problemas entre Moto Clubs). Viene del norte hacia abajo metiéndose esta cultura, si hay clubes rivales que han llegado a tener fallas en concentraciones nacionales. En esos lugares que son tan masivos de repente pasa que se topan estos Clubes que traen fallas de años viejos, que si llegan a la violencia, pero cada quien sabe donde debe meterse y donde no debe meterse. (CH) Aquí localmente se da un poquito más tal vez el hablarlo, el hecho de decir: “¿Vale la pena la bronca?, bueno, aviéntense un duelo”. Cada quien en lo suyo, sin chaleco, para no embarrar al club, para no hacer el desmadre mas grande; lo de caballeros sería: “Oríllate, te traigo ganas, quítate el chaleco, nos damos de caballeros y se acabó”. (J) Antes de eso, si alguien tiene fallas con otro Moto Club, que se llega a dar por alguna peda, algún incidente, problemas de mujeres o equis cosa, primeramente se habla con el otro Moto Club, con la mesa directiva… (CH) Para eso está el sargento de armas, es el que nivela la situación: “¿Vale la pena el vergazo? -Le mando mensajes a su esposa y se emputó -Aah bueno, dense un tiro” y se va el Sargento de Armas de su Moto Club, el Sargento de Armas de mi Moto Club, se quitan chalecos, se dan un duelo y de caballeros y ya, pero no se escala a un pleito masivo. (J) Por lo general cuando hay un roce, se habla, se busca al líder de tal grupo: “Oye, hubo un problema con un muchacho de los tuyos, queremos ver si va a seguir o si tienen algo que limar después de ese roce”>>.
A través de los tres/cuatro años que se mencionan, Serpiente MC también ha pasado por estas situaciones en algún momento, como hace algunos meses. Sorteando el camino, tomando sus curvas y desniveles, pero fluyendo suave y directo, siempre de cara al viento. <<(J) Fue una entrega de parches, en una junta mensual, hicimos el ascenso de varios miembros, se entregaron unas insignias, subimos unas fotografías a nuestra página de Facebook y a alguien se le fue una reacción, un me divierte. Varios del Moto Club se lo tomaron mal, yo conocía al muchacho, sabía en qué Moto Club estaba, hable con su presidente, le digo: “Oye, es algo para mí no tan cotidiano, quiero hablarlo contigo, que tú le des el regaño al chavo, antes de nosotros tener que hablar con él …”(CH) No tan cotidiano, hay gente que se molesta, nada más dime si si le da risa o si se le fue el like… (J) Y ya. Platicaron con el chavo, me dicen: “Sabes que, el chavo es tranquilo”, y se disculpó, dijo que fue un error y ya, no pasó a mayores. Ahí quedó>>.
Un poco más de gente que hace rato escucha con atención lo que la mesa comparte, en silencio, expectantes a lo que cada miembro tiene por decir. Las cervezas se siguen bebiendo y los cigarros fumando. Algunos miembros del Moto Club apenas se integran a la celebración de la noche y al entrar saludan a los presentes, uno por uno. Más allá de los beneficios que trae un chaleco, lo que implica un parche, las noches de fiesta y las peleas callejeras, hay algo más detrás de todo esto. Cada persona elige su significado, cada vida elige el camino para llegar a su destino, pero al final todas las rutas convergen en un mismo punto. <<(Z) Andar en la moto, vato, es algo inexplicable. Agarras carretera y es algo bien diferente que solamente andar local: subidas, bajadas, tienes que saber controlar tu moto, conocerla de pies a cabeza. Saber qué es lo que traes y hasta qué límite puedes llegar. Llegas a un punto que a veces ya no sientes ni siquiera que vas en la moto: te pican las abejas, chocas con mariposas. Con mi olfato voy por la carretera y voy sintiendo los olores: “A la madre, acá huele a caca de vaca, acá huele a pasto fresco”, es una experiencia que no se puede explicar, es algo que no experimentas en un carro. (J) Es un despeje para la mente bien chingón, se podría decir que es una terapia (viajes en carretera). (CH) Antes traía un carro y me fui con mi vieja a Parras, Coahuila. Mi vieja se la paso dormida todo el camino, no vio nada, no disfruto nada. Después compré la moto y nos fuimos de nuevo a Parras, mi vieja se la pelo porque no se podía dormir, a webo tenía que ir despierta porque se dormía, sentía que se caía y se levantaba. Estaba pajareando y me dice: “Oye, que bonito camino -¿Ves?, lo que yo disfrute en el carro, tú no lo disfrutaste conmigo”. Ahora en moto es una conexión diferente>>.
Y como bien lo menciona Zapata, hay que conocer bien la moto, al igual que la vida, sus límites y alcances. Aun así todos caemos en algún momento, quien no se ha caído de una moto es porque nunca se ha subido a una. <<(MC) Hay una frase que dice: “Hay dos tipos de motociclistas, los que se cayeron y los que se van a caer”, y es al chile, la neta, todos se caen>>. A Marcus lo atropelló un perro, Zapata cayó en una zanja, Mario ha chocado contra un camión y contra una motocicleta, todos tienen sus historias de guerra. (MA) La semana antepasada cumplí años y me accidenté, me rompí todo a la verga, todo el día tirado… (CH) El otro camarada le marca al papá de Mario del cel de Mario, y contesta el viejon y empieza “Estas son las mañanitas” y el otro vato dice “-Eh Don, es que no soy Mario, ¿se acuerda de mí? Soy Chore, Mario se está muriendo, se puso un vergazote en la cara”, “!Aaah puta madre!, voy pa’ allá” (risas)>>. El riesgo es parte de la diversión, saber que puedes equivocarte. Pero también saber que si eso pasa, podrás levantarte. <<(Z) Hay raza que choca un carro y no quiere volver a manejar en su vida. La primera vez que me caí dure como una semana que no quise ver la moto. Me he vuelto a caer más veces, pero son de esas veces que de inmediato paras tu moto y otra vez, vámonos; si gracias a Dios no te pasó nada grave, que todavía te puedas mover, otra vez, vámonos. Aunque te vayas con los rines todos chuecos, jala porque jala>>.
Afuera hay una larga fila de motocicletas estacionadas y dentro de la casa la euforia ahora se concentra en el patio, donde la gente se ubica. En el patio hay maleza y a machetazos limpian el lugar, mientras que en un rincón del mismo se improvisa la ubicación de la parrilla y alguien logra encender la lumbre después de intentarlo un rato. El camino te da resiliencia y adaptación al cambio, nunca sabes que te espera detrás de la próxima curva.
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